La Liga está más abierta que nunca. El Real Madrid fue incapaz de ganar al Valencia en el Santiago Bernabéu y el FC Barcelona está ya a solo cuatro puntos de diferencia. Ahora Pep Guardiola ya no puede decir eso de que la Liga está imposible.
Los de José Mourinho no pudieron tumbar al que hasta ese momento era el tercer equipo de la competición. Los de Unai Emery se encerraron muy bien atrás y Guaita estuvo espléndido bajo palos. Cristiano Ronaldo, Gonzalo Higuaín, Karim Benzema, Ángel Di María… todos lo intentaron pero sin acierto.
El resultado más justo era una victoria por la mínima del Madrid, pero no tuvieron su día de cara a puerta y ahora no podrán permitirse ningún fallo más si quieren llegar al Camp Nou con la certeza de que saldrán de allí como líderes. Antes de ese partido decisivo se verán las caras con el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón y con el Sporting de Gijón en casa. Cuidado con estos últimos, que aunque están tocados y hundidos todavía pueden amargarle la Liga al actual líder. El año pasado ya dieron la campanada…