Por fin vimos al Real Madrid ganando con comodidad en el Santiago Bernabéu, algo que no es nada habitual en lo que va de temporada. La víctima, el Eibar, se llevó tres goles y ni un solo punto, así que ve el descenso demasiado cerca.
Lo único preocupante es que Cristiano Ronaldo terminó los 90 minutos sin ver puerta. Solo ha marcado un gol en nueve jornadas y eso es algo extrañísimo, a pesar de que a Zinedine Zidane no le quita el sueño.
Gran primera parte de Asensio
Empezaron fuerte los blancos gracias al talento de Marco Asensio, que por fin fue titular. El balear controló con mucha calidad un balón en la frontal del área cuando solo había transcurrido un minuto de partido. Se lo acomodó y vio como entraba Isco libre de marca por el otro lado, pero el malagueño no fue capaz de batir al guardameta visitante.
Quien sí acertó, o mejor dicho erró, fue Paulo Oliveira, que inauguró el marcador en una jugada muy desafortunada. Isco sacó un córner en corto junto a Asensio, que la puso con rosca buscando a Sergio Ramos y encontró la cabeza del defensa del Eibar, que sin querer introdujo el balón en su propia portería.
Poco después llegó el tanto de Asensio, que remató a bote pronto un centro desde la banda izquierda para reivindicarse una vez más.
Jugadón para el 3-0
De la segunda parte se pueden recopilar varias ocasiones del Madrid, algunas de Cristiano. Sin embargo, el único que vio puerta fue Marcelo, que culminó una fantástica jugada en la que también intervinieron Luka Modric, Theo Hernández y Karim Benzema. Este último fue quien le dio la asistencia que le permitió revolverse para disparar libre de marca.
Barça y Valencia no fallaron
La mala noticia para el Madrid es que el Barça no pinchó ante el Málaga en casa. Ganó por 2-0 gracias a los tantos de Gerard Deulofeu y Andrés Iniesta. El que tampoco afloja es el Valencia, que le endosó un contundente 4-0 a un Sevilla que en estos momentos está grogui. Los de Marcelino García Toral son segundos con 21 puntos, 4 menos que el Barça.