El Barça no fue el único favorito que se despidió de la Champions League anoche. El Manchester City también cayó eliminado antes de lo esperado tras no ser capaz de remontar el 3-0 que encajó en Anfield ante un Liveropol que volvió vencer.
Los de Pep Guardiola empezaron muy bien gracias al gol que anotó Gabriel Jesus en el minuto 2 a pase de Raheem Sterling, pero no fueron capaces de ampliar esa ventaja y vieron como su rival les mataba a la contra.
Salah y Firmino remataron la faena
Mohamed Salah, quién si no, fue el encargado de igualar la contienda para enfriar los ánimos por completo. La remontada parecía imposible porque los locales necesitaban cuatro goles más para estar en las semifinales de la Champions, y como era de esperar no llegaron.
La sentencia definitiva llegó en el minuto 76, cuando Roberto Firmino superó a su compatriota Ederson Moraes para hundir por completo a un City que tendrá que conformarse con rematar la Premier League para terminar la temporada de la mejor forma posible.
Guardiola rajó de Lahoz
Guardiola, por cierto, fue expulsado por Mateu Lahoz al descanso. En la rueda de prensa posterior dijo que al árbitro español «le gusta sentirse especial», algo que refleja el enfado que llevaba por un gol legal de Leroy Sané que les anularon. Además, tampoco olvida su actuación en la eliminatoria ante el Mónaco del año pasado, de la que recuerda que no señaló un claro penalti cometido sobre Agüero que precedió a un gol de Falcao. En definitiva, hizo unas declaraciones muy al estilo Mourinho.