Nada pudo hacer el Valencia para plantar cara al Manchester City en el partido amistoso que disputaron en tierras inglesas ante unos 27.000 espectadores. El conjunto de Unai Emery continúa sin ver puerta y ya echa de menos a David Silva y David Villa, los dos mejores futbolistas que tenía hasta hace unas semanas. Precisamente el canario cuajó hoy un gran partido, aunque en esta ocasión con una camiseta muy distinta a la del Valencia.
En el minuto 33 de partido llegó el primer gol, obra de Gareth Barry. El internacional inglés aprovechó un gran centro de Boateng para marcar de cabeza, ante una salida de Miguel Ángel Moyá que no fue muy buena que digamos. Ya en los últimos compases del choque, el brasileño Jo Alves estableció el 2-0 definitivo al rematar un pase muy forzado del veterano Patrick Vieira.
El resultado es de lo más normal si tenemos en cuenta que el City está mucho más rodado. La semana que viene arranca la Premier League y los ingleses demostraron su superioridad, algo que es normal teniendo en cuenta que es el club que más dinero se ha gastado este verano (cerca de 100 millones de euros).