Sí, es verdad que suena raro decir que un equipo toca fondo en la segunda jornada de la competición, pero es que lo del Manchester United viene de lejos, de muy lejos. Los hombres del ya cuestionado Erik Ten Hag cayeron goleados en campo del modesto Brentford por un escandaloso 4-0. Además, los cuatro tantos del partido subieron al marcador en la primera mitad, algo que dice mucho del desastre que es ahora mismo este equipo que no se cansaba de ganar títulos con Sir Alex Ferguson en el banquillo.
Ni rastro de Cristiano
Cristiano Ronaldo, que está como loco por marcharse y que no traga al técnico holandés, fue titular a diferencia de lo que sucedió en la primera jornada. No generó demasiado peligro y se fue a la ducha con cara de pocos amigos, sabedor de que le espera un año de no disfrutar del fútbol a menos que pueda marcharse antes de que se cierre el mercado de fichajes.
El vendaval lo inició Josh Dasilva haciendo el 1-0 en el minuto 10 tras un error garrafal de David de Gea, mientras que el 2-0 fue obra de Mathias Jensen en el minuto 18 aprovechando una mala salida del balón.
El público que se acercó hasta el Gtech Community Stadium no se podía creer lo que estaba viendo, y menos cuando Ben Mee sentenció con el 3-0 en el minuto 30 y Bryan Mbeumo urgó todavía más en la herida con el 4-0 definitivo en el minuto 35.
Esperábamos a un United capaz de salir en tromba a por los goles que necesitaba en la segunda mitad, pero lo cierto es que no tuvo ni la calidad ni la garra suficiente como para acercarse en el marcador. Tuvo algunas ocasiones, pocas claras, pero también hay que decir que el Brentford rozó el quinto de la tarde en varias ocasiones.
Las dos caras de la moneda
Así las cosas, los diablos rojos son colistas de la Premier League con un triste bagaje de un gol a favor y seis en contra, que es casi lo mismo que tienen sus vecinos del Manchester City pero al revés. Los de Pep Guardiola son líderes con 6 puntos después de haber goleado al Bournemouth por 4-0 en el Etihad Stadium.