Ayer solo existió un equipo sobre el césped del Allianz Arena. El Bayern de Múnich goleó al que probablemente es el mejor equipo de la historia con una facilidad pasmosa. El árbitro tuvo algo que ver en el 4-0 final, pero nadie puede negar la superioridad de una plantilla que se abre paso y que va a seguir creciendo con fichajes como el de Mario Götze y con Pep Guardiola en el banquillo. Parece imposible que el catalán pueda hacerlo mejor que Jupp Heynckes, pero estoy convencido de que subirá el nivel de este rodillo que mete miedo a todos sus rivales.
El primero de la noche llegó en el minuto 24, cuando Thomas Müller aprovechó un remate de Dante para empujarla a placer. Poco pudo hacer Víctor Valdés para evitar el gol a bocajarro. El Barça dominaba la posesión del balón pero no era capaz de hacer daño a un Bayern que presionaba de forma incansable para provocar contraataques letales.
Tras la reanudación llegó la sentencia definitiva de una eliminatoria que está casi imposible para los culés. Mario Gómez hizo el 2-0 en fuera de juego en el minuto 49, Arjen Robben puso el 3-0 en el marcador tras aprovechar una obstrucción de Müller y el propio Müller estableció el 4-0 definitivo tras una gran jugada de Alaba por la banda izquierda.
Las claves del partido
Posesión infértil: De nada sirve tener más de un 60% de posesión del balón si no se sabe qué hacer con él. Ayer vimos un claro ejemplo de ello, ya que el Barça controló el partido sin crear ocasiones de gol claras. Manuel Neuer estuvo tranquilo durante los 90 minutos, todo lo contrario que Víctor Valdés.
Messi no estaba para jugar: El astro argentino no recibió el alta médica, pero en Can Barça decidieron que tenía que jugar. Esta vez su simple presencia no asustó a los rivales, ya que los futbolistas del Bayern abortaron sus pocas jugadas de peligro. Corrió poco y estuvo más apagado que nunca. No debió jugar.
Alexis y Bartra no están al nivel: Lo del chileno es algo que se sabe desde que aterrizó en Barcelona. En el Udinese lo haría muy bien, pero aquí está decepcionando a los aficionados y a quienes decidieron invertir más de 30 millones de euros en su fichaje. No le sale nada. Lo del canterano no es tan preocupante porque no ha costado ni un solo euro y es un chico muy joven. Lo único que ha quedado claro es que no está para jugar este tipo de partidos. El Barça fue demasiado vulnerable en defensa.
Tito Vilanova no movió el banquillo: El único cambio que hizo, el de Villa por Pedro, llegó demasiado tarde. Perdían por 3-0 y la eliminatoria estaba demasiado cuesta arriba. Creo que Cesc Fábregas por Alexis ya de inicio hubiera sido lo más acertado. El catalán se estaba poniendo a tono en los últimos partidos y es un hombre muy curtido en este tipo de partidos. Otra opción era la de Cristian Tello, que tuvo que ver todo el partido desde el banquillo.
Sergio Busquets no tuvo el día: Es de los que siempre cumplen, de los imprescindibles. Sin embargo, ayer Sergio Busquets desentonó más que nunca. Perdió muchos balones y en defensa no recuperó los que suele recuperar. Definitivamente no fue su día.
Juego aéreo: El Bayern fue muy superior en el juego aéreo. Cada córner era una ocasión clara de gol. De hecho, los dos primeros tantos llegaron desde ahí.
Robben y Ribéry son un dolor de cabeza: Del Bayern me gustó todo anoche, pero destacaría a Robben y Ribéry, que le ganaron la partida a Jordi Alba y Dani Alves respectivamente. De hecho, el ex del Valencia acabó tan desquiciado que le lanzó el balón en la cara poco antes del final. Si le hubieran mostrado la roja no hubiera pasado nada, aunque de todas formas no podrá jugar el partido de ida porque cumple el ciclo de tarjetas.
Errores arbitrales: No hay que olvidar que las decisiones arbitrales condicionan mucho los partidos. No explican la derrota del Barça en el Allianz Arena, pero sí explican tres de los cuatro goles que recibieron los catalanes. También hay que decir que dejó de pitar dos penaltis por claras manos a favor de los bávaros.
Conclusiones
A este Barça no se le puede reprochar prácticamente nada. Son jugadores que han escrito las mejores páginas del club y que pueden seguir haciéndolo en los próximos años. La secretaría técnica debe trabajar cuanto antes para reforzar el ataque (tal vez con Neymar) y la defensa. Fichar a un central de garantías es una prioridad porque Carles Puyol se lesiona demasiado y Javier Mascherano es más medio centro defensivo que central.
La remontada no es imposible porque cosas más increíbles hemos visto a lo largo de la historia. Sin embargo, no hay que olvidar que el Bayern solo ha encajado 14 goles en la Bundesliga esta temporada. Marcarle 4 para forzar la prórroga no parece nada fácil. Más que una «nit màgica», el Barça necesita una «nit miraculosa». De lo que estoy seguro es de que su gente no va a faltar a la cita para apoyar a unos jugadores que se lo merecen todo.