Muy difícil lo tendrá el Sevilla para meterse en las semifinales de la Champions League tras caer ante el Bayern de Múnich en el Ramón Sánchez Pizjuán. Los alemanes empezaron perdiendo, pero fueron capaces de darle la vuelta al marcador y lo tienen todo de cara para estar entre los cuatro mejores clubes de Europa.
El Bayern de Heynckes da miedo
De la mano de Jupp Heynckes, que acumula doce victorias consecutivas en la máxima competición continental, todo es más fácil. El técnico alemán planteó muy bien el partido y vio como los suyos tuvieron la calidad y la paciencia necesarias para levantar un 1-0 en contra.
Sarabia llevó la ilusión a las gradas
Pablo Sarabia, que minutos antes había desperdiciado una clarísima ocasión de gol, adelantó a los andaluces en el minuto 31 al aprovechar una buena asistencia. La afición sevillista enloqueció y daba la sensación de que los de Vincenzo Montella podían acabar con otro grande del viejo continente, pero la alegría les duró más bien poco.
Ribéry y Thiago remontaron
Franck Ribéry provocó el empate a uno en una jugada que nació por la banda izquierda del ataque de los bávaros. El francés la quiso pone en el área y se topó con los pies de Jesús Navas, que sin querer desvió el balón lo suficiente como para despistar a un David Soria que estuvo a punto de evitar el gol en propia puerta en el minuto 37.
Tras el paso por los vestuarios el Bayern hizo el 1-2 que le da ventaja de cara al partido de vuelta. El autor del tanto fue Thiago Alcántara, que remató solo un balón colgado al segundo palo. El ex del Barça golpeó el esférico de cabeza lanzándose al verde del coliseo sevillista, con tanta suerte que Escudero desvió la trayectoria y Soria no pudo reaccionar a tiempo.
Al Sevilla le toca ganar en un estadio muy complicado como ya hizo en Old Trafford. Imposible no es, pero no me jugaría ni un solo euro de mi bolsillo.