En el Camp Nou están preocupadísimos con André Gomes. El futbolista portugués solo les da dolores de cabeza, tanto por su bajo rendimiento como por los pitos que le dedica la afición, algo que encendió a Ernesto Valverde el pasado domingo en el duelo que les enfrentó al Atlético de Madrid.
Llegó con la etiqueta de joven estrella, de centrocampista capacitado para ganar el Balón de Oro. Sin embargo, no es ni una sombra del que llegó a brillar con la camiseta del Valencia.
Sus números cantan
Basta con dar cifras para tener claro que no está dando la talla. Lleva 71 partidos con la camiseta del Barça y solo ha marcado tres goles y ha repartido cuatro asistencias. En el Valencia era mucho más decisivo y a Josep Maria Bartomeu no le importó desembolsar 35 millones de euros en su día para llevárselo.
Y pensar que el Madrid también le quiso…
El Real Madrid llegó a coquetear con la posibilidad de llevárselo. El hecho de que Jorge Mendes sea su representante les daba cierta ventaja, pero el luso quiso jugar en el Barça y se hizo con la suya, declinando ofertas de clubes muy importantes que ahora estarán celebrando su decisión.
La solución es traspasarlo
Valverde le está dando muchas oportunidades. Ha confiado en él en partidos importantes, pero cuesta rescatar uno solo en el que haya dado la talla. Su contrato expira el 30 de junio de 2021 y no es mala idea que empiecen a buscarle una salida. Con lo que se ha inflado el mercado es probable que recuperen el dinero invertido, aunque sus pretendientes tendrán que ver vídeos de cuando jugaba en el Valencia para poner los 35 kilos sobre la mesa.
Veremos cómo termina la temporada para él tras el mal trago que vivió el pasado domingo en el Camp Nou. A la afición se le ha terminado la paciencia y puede que no vea con malos ojos la posibilidad de salir traspasado si eso le ayuda a recuperar la confianza. Es demasiado joven y debería crecer en otra parte, con menos presión.