Los futbolistas del Alavés abandonaron el Camp Nou con una sensación agridulce. Estaban orgullosos del partido que acababan de jugar ante el líder, pero se quedaron sin puntuar cuando parecía que iban a rascar algo. Los de Abelardo pusieron contra las cuerdas a un Barça que no estuvo tan brillante como en otros partidos de la temporada, aunque al final sucumbieron con polémica incluida.
Guidetti adelantó a los vascos
El sueco John Guidetti abrió la lata en el minuto 23, en un contraataque perfecto en el que Samuel Umtiti no le pudo frenar y tampoco reclamó fuera de juego, ya que arrancó desde su propio campo.
Aunque Sobrino se la pedía a gritos, el ex del Celta decidió definir y no se equivocó. Bueno, en realidad sí que se equivocó porque se resbaló a la hora de disparar, pero tal vez eso engañó a un Marc-André ter Stegen que no reaccionó a tiempo.
La cosa cambió con Sergi Roberto y Jordi Alba
El Barça echó de menos a sus laterales. Sin Sergi Roberto y Jordi Alba en el césped, todo parecía más complicado. Digne y Semedo no aportaron gran cosa en ataque y tuvo que llegar el segundo tiempo para que Ernesto Valverde diera entrada a los titulares.
Suárez y Messi le dieron la vuelta al marcador
El Alavés pudo sentenciar y no lo hizo. Sin embargo, no le preocupó demasiado porque se sentía cómodo atrás. Todo hasta que Andrés Iniesta hizo de las suyas por banda izquierda y la puso al segundo palo, donde encontró el acierto rematador de Luis Suárez, que sin duda alguna es todo un especialista en rematar de volea.
El empate llegó en el minuto 72 y el gol de la victoria subió al marcador en el minuto 84. Una falta de Wakaso a Paco Alcácer, que venía en fuera de juego, fue el caramelo que estaba esperando Leo Messi para darle los tres puntos al Barça. Lanzó el tiro libre directo de forma magistral y los aficionados expulsaron todos los nervios saltando y cantando.