Todavía queda mucha Liga, o eso es lo que se podría decir esta noche si el Real Madrid logra vencer al Espanyol en Cornellá-El Prat. El FC Barcelona no pudo ganar en Gijón a un Sporting que jugó un partido muy serio y mereció llevarse el punto que logró.
Con un Pep Guardiola recién renovado y tras una jornada de selecciones que siempre sienta mal a los azulgrana, el Sporting de Manolo Preciado hizo todo lo que estaba en su mano para poner contra las cuerdas al mejor equipo del mundo. David Barral, un jugadorazo que siempre tira del carro de su equipo, inauguró el marcador en el minuto 16 tras una gran jugada individual en la que dejó atrás a Gerard Piqué y a Gabi Milito.
A partir de ahí los locales dieron un recital de organización y buena colocación. Los Iniesta, Xavi y Messi no encontraban el camino, aunque a falta de 10 minutos para el final apareció la calidad de David Villa, quien como siempre decidió no celebrar el gol en la que es su casa desde que empezó su carrera futbolística. Controló un buen pase de Messi y batió a Cuéllar con una vaselina sublime.
Ahora, si el Madrid gana hoy, la Liga estará abierta porque sólo habrá 5 puntos de distancia entre los dos grandes de España.