Bastante preocupante es la situación del Athletic de Bilbao en estos momentos. Sus jugadores no levantan cabeza y los resultados siguen siendo muy negativos. El pasado fin de semana se llevaron un palo tras perder ante su eterno rival, la Real Sociedad, mientras que ayer volvieron a caer en la Europa League. El Sparta de Praga fue muy superior y se llevó los tres puntos merecidamente. El resultado final fue de 3-1 a favor de los checos.
Al revés de lo que sucedía la temporada pasada cuando el Athletic viajaba por Europa, no tuvo el control del balón y generó pocas ocasiones de gol. Fernando Llorente, muy cuestionado tras el encontronazo que tuvo con Marcelo Bielsa en un entrenamiento, fue suplente y no saltó al terreno de juego hasta el minuto 67 en sustitución de Aritz Aduriz.
Zapotocny hizo el primero en el minuto 24 con un soberbio disparo desde 24 metros de distancia que sorprendió a Gorka Iraizoz. El segundo llegó antes del descanso y fue obra de Balaj, quien libre de marca remató a placer.
Hasta los arbitrajes van en su contra
Tras la reanudación más de lo mismo. En el minuto 54 el árbitro se equivocó pitando un penalti inexistente a favor de los de la capital de la República Checa. Husbauer se encargó de aprovechar el regalo desde los 11 metros con una ejecución impecable. Los de Bielsa trataron de darle la vuelta al partido, pero solo Óscar de Marcos pudo marcar en el minuto 71 tras una gran jugada individual de Iker Muniain.
El Athletic es en estos momentos colista del Grupo I con 1 punto. Lidera la clasificación el Olympique de Marsella con 6 puntos.
