El terror volvió a paralizar un partido de fútbol. El que iban a disputar Bélgica y España en el estadio Rey Balduino no fue el único que dejó de disputarse por riesgo de atentado. Un objeto sospechoso localizado muy cerca del estadio HDI-Arena de Hannover obligó a suspender el Alemania – Holanda previsto para las 20:45 horas.
Pánico en Hannover
Una hora antes de que el balón empezara a rodar, y con la canciller alemana Angela Merkel a punto de acudir a Robert-Enke-Straße 1, que es donde se encuentra el estadio, la policía recomendó dejar para otro día el amistoso que iban a disputar dos de las mejores selecciones del viejo continente. Volker Kluwe, jefe de la policía de Hannover, comentó la situación:
Tuvimos indicios concretos de que alguien quería detonar un explosivo en el estadio. Hallamos una nota sobre un posible ataque con bomba.
Hay que decir que hasta ahora no se han hallado explosivos y no ha habido ni una sola detención. Eso sí, también evacuaron el TUI Arena de Hannover, donde miles de alemanes tenían previsto acudir al concierto de la banda The Söhne Mannheims.
Los ingleses cantaron «La Marsellesa»
El partido que sí se disputó, ante un despliegue policial brutal, fue el Inglaterra – Francia. Los galos tuvieron el mejor homenaje que se merecían en Wembley, un templo del fútbol que se puso de pie para corear «La Marsellesa», un himno que después de los atentados del pasado viernes suena con más fuerza que nunca.
Lo de menos fue el resultado. Los ingleses ganaron por 2-0 con goles de Dele Alli (minuto 39) y Wayne Rooney (minuto 48).