Al final va a ser verdad eso de que Chicharito Hernández es una estrella. Tras su gol ante el Atlético de Madrid se le dio demasiada publicidad, pero ayer se la ganó a pulso firmando un doblete ante el Celta en Balaídos.
El delantero centro mexicano, que volvió a suplir al bueno de Karim Benzema en la punta de ataque, hizo muy bien su trabajo y mantuvo con vida a un Real Madrid que todavía está metido de lleno en la lucha por el título. El Barça no se puede permitir ni un pinchazo en las cinco jornadas de Liga que faltan porque la diferencia entre ambos es de tan solo dos puntos.
El Celta dio primero
Fue un partido realmente bonito. Acabó 2-4 y se vieron ocasiones de gol de todos los colores. El Celta salió al campo sin nervios y sin temores y fruto de ello se adelantó en el marcador. Fue por mediación de Nolito, que encaró a Arier Illarramendi y Dani Carvajal para superar a Iker Casillas tras amagar con el disparo. El ex del Barça anotó su décimo tanto en lo que va de campeonato.
Chicharito al rescate
No se vino abajo el Madrid, que igualó la contienda en el minuto 16 gracias a un rechace que aprovechó Toni Kroos. El alemán definió muy bien dentro del área. Ocho minutos más tarde fue Chicharito quien batió a a Sergio Álvarez tras una gran jugada con James Rodríguez.
Antes del descanso se vieron dos goles más. Primero el de Santi Mina, que en el minuto 28 superó a Casillas con algo de fortuna. Se plantó ante el capitán blanco tras un buen pase a la espalda y su primer disparo con la pierna izquierda dio en el poste. Marcelo le seguía y no fue capaz de hacerse con el rechace, que fue a parar a las botas de un Mina que no falló.
James puso al Madrid por delante en el minuto 43. Cristiano le habilitó y el colombiano tuvo bastante suerte. Su disparo tocó en un defensa celeste y entró lentamente en la portería local.
La segunda parte fue un quiero y no puedo del Celta, que lo intentó hasta el último minuto. Chicharito volvió a aparecer para certificar la victoria controlando a las mil maravillas un buen pase de Sergio Ramos. Definió muy rápido y lo celebró con la alegría que le caracteriza. Luego fue sustituido y recibió la felicitación tanto del cuerpo técnico como de sus compañeros. Es el hombre de moda en la capital y debe aprovecharlo.