No han sentado nada bien las medidas para educar a los más violentos que acuden al Sánchez Pizjuán para «animar» al Sevilla. Algunos miembros del Consejo de Administración del club, sobre todo el presidente, José María del Nido, han sido amenazados.
Aunque la mayoría de los sevillistas están de acuerdo con las medidas que se van a tomar, hay un sector minoritario que no está dispuesto a que las cosas vayan a cambiar. Por eso han amenazado de muerte a Del Nido, algo que el vicepresidente, José María Cruz, desveló ayer en la Cope:
Ya se han producido amenazas, antes del Consejo, durante la noche de ayer y también hoy -por el jueves- El presidente ha recibido amenazas de muerte por correo electrónico y por teléfono, las cuales serán objeto de denuncia ante la Policía, para que las investigue.
Veremos en qué termina todo esto. Lo que está claro es que a las gradas del Sánchez Pizjuán acuden demasiados energúmenos. Por algo se ha convertido en uno de los campos más problemáticos de España en los últimos años (véase el escándalo que se armó en el último derbi ante el Betis).