Salvo milagro o tratamiento a base de placenta de yegua en plan milagroso, David Silva no podrá disputar el partido de vuelta de las semifinales de la Champions League. El Santiago Bernabéu no tendrá que estar pendiente de las diabluras de uno de esos jugadores que marcan la diferencia. El ‘Kun’ Agüero le echará de menos.
Duró una media hora
El mago de Arguineguín se llevó las manos al muslo derecho cuando apenas había transcurrido la primera media hora. Notó un pinchazo y tuvo que parar. Dani Carvajal y Pepe le consolaron al tiempo que se alegraban, y Manuel Pellegrini llamaba al nigeriano Kelechi Iheanacho para no quedarse con un jugador menos sobre el césped del Etihad Stadium.
Los aficionados se pusieron en pie y le ovacionaron. Una ovación que probablemente le hubiera dedicado el público del Bernabéu, que últimamente se ha especializado en rendir homenajes a jugadores que nos han hecho disfrutar, como por ejemplo Alessandro Del Piero, Andrea Pirlo, Francesco Totti o Andrés Iniesta.
No cuentan con él
Pellegrini no pudo ser más claro en la rueda de prensa posterior al partido: «Tiene una lesión muscular que no se cura en una semana». Dudo que sea una estrategia para jugar al despiste, porque las roturas fibrilares suelen implicar un plazo de recuperación que como mínimo te deja fuera un par de semanas.
La baja de Silva deja al equipo inglés tocado de cara al partido de vuelta, si bien es cierto que se encomendarán a los contraataques, faceta en la que el canario no es precisamente un especialista. Lo suyo, más que la velocidad, es el temple y la calidad. Le gusta más jugar en estático, y me temo que en el Bernabéu todo lo que vamos a ver del City en ataque van a ser chispazos de jugadores como Agüero, Kevin De Bruyne, Jesús Navas o Raheem Sterling.