De mucho le ha servido a Dani Benítez arrepentirse del botellazo que propinó a uno de los asistentes de Clos Gómez tras el partido que disputaron el Real Madrid y el Granada el pasado sábado. El centrocampista balear se perderá tres meses de competición, lo cual significa que el Comité de Competición ha aplicado la pena mínima estipulada en estos casos.
El plazo empezará a contar desde hoy, pero se aplicará solo en periodo de competición. Eso significa que cuando termine el verano todavía seguirá con ese peso encima. Hasta finales de noviembre no podrá volver a vestir la camiseta del club que le paga. Compartarse como un energúmeno le ha salido muy caro, aunque pudo costarle tres meses de sanción de no haberse arrepentido públicamente.