En Stamford Bridge se habla de limpieza total. José Mourinho quiere cambiar el rumbo del Chelsea y cuenta con el apoyo de Roman Abramovich. El multimillonario ruso le va a dar carta blanca para que haga lo que le dé la gana durante el mercado de invierno, así que los londinenses se van a mostrar muy activos a la hora de fichar y vender en el mes de enero.
Los señalados
El técnico portugués ha detectado las manzanas podridas del cesto. Cree que la solución pasa por vender a Oscar, Eden Hazard, Nemanja Matic y Diego Costa, cuatro futbolistas que están ofreciendo un nivel muy pobre si tenemos en cuenta lo que aportaron la temporada pasada, la que coronó al Chelsea como campeón de la Premier League.
Oscar no tiene demasiados minutos y la Juventus ya ha preguntado por él. Los italianos se interesaron por el brasileño el pasado verano, pero al final no llegaron a un acuerdo. Esta vez las cosas son distintas, ya que el jugador está dispuesto a marcharse y el club quiere negociar.
Matic sigue siendo titular junto a Cesc Fábregas en la medular. El serbio es el encargado de recuperar balones, una función que no se le está dando tan bien en lo que va de curso. Pocas veces se ha hecho con el control del centro del campo y es uno de los señalados por Mourinho, que ha llegado a prescindir de él en los últimos enfrentamientos.
También lo está pasando muy mal Hazard, el mejor jugador de la pasada Premier. El belga ha dejado de ser imprescindible y ya sabe lo que se siente viendo un partido desde el banquillo. Mou no le ve en su mejor momento y le ha sentado sin pensárselo dos veces.
Dicen que el Real Madrid anda tras sus pasos y el jugador no descarta la posibilidad de cambiar de aires. Dudo que suceda en enero, pero es muy probable que acabe fichando por un grande en verano.
Para terminar, el que menos está funcionando es Diego Costa. Apenas ve puerta y está más pendiente de pelearse que de ayudar a su equipo. Tanto Mourinho como los aficionados se están cansando del hispano-brasileño, que a pesar de todo sigue siendo titular porque Radamel Falcao y Loïc Rémy cuentan muy poco para Mourinho.