Thibaut Courtois no solo es uno de los mejores porteros del momento. También es un tipo entrañable, un hombre al que echarán mucho de menos en el vestuario del Atlético de Madrid. Puede que no sea de los que más habla, pero tiene una pinta de bonachón que es demasiado.
Tras tres años cedido en el Manzanares, le ha tocado regresar al Chelsea. Para él no ha sido fácil, pero ha tenido que aceptarlo y ahora sabe que será titular en Stamford Bridge. No iba a regresar para ser suplente de Petr Cech, al que todavía querían darle más años de cuerda, pero la enorme progresión de Courtois en el Atlético ha cambiado los planes de José Mourinho, que quiere verle bajo palos esta temporada.
Un detalle para excompañeros y aficionados
El caso es que el internacional belga se ha despedido de los jugadores, del cuerpo técnico y de la afición a través de un vídeo muy bonito. Nada de lágrimas. Solo palabras de recuerdo y agradecimiento que a mí me suenan de lo más sinceras. Dice que siempre llevará al Atlético en el corazón y estoy convencido de que cuando vuelva al Vicente Calderón será recibido como un héroe. Y como esto del fútbol da muchas vueltas, quién sabe si algún día volverá a defender el escudo del club madrileño dentro de unos años.