Se habla mucho de Cristiano Ronaldo, que fue nombrado MVP del partido de ida de las semifinales de la Champions League. Sin embargo, a mí me llamó la atención el partidazo que hicieron una vez más los dos cerebros del equipo, Luka Modric y Toni Kroos. No solo manejaron los tiempos a su antojo, sino que defendieron con eficacia e inteligencia. Fueron una pesadilla para los centrocampistas del Atlético de Madrid, que se vieron superados en todo momento.
Calidad a raudales
Tener a Modric y a Kroos es tener a dos jugones con personalidad. Si encima les cubres las espaldas con un tipo duro como Casemiro, tienes la seguridad de que los dos van a desarrollar todo su potencial sobre el césped sin desgastarse en exceso.
Anoche no perdían ni un balón. Fueron precisos en todo momento e hicieron lo que les dio la gana. De hecho, hasta pudimos ver a Modric sumándose al ataque y probando suerte con algún que otro disparo que no terminó entre los tres palos.
Entre ambos se entienden a las mil maravillas y se ayudan cuando parece que no hay salida de balón. Son dos jugadores con mucha facilidad para asistir a los compañeros. Modric es más de pase corto y conducción cuando es necesario, mientras que Kroos prefiere el pase largo y suele buscar pases de los que hacen daño. Son, en definitiva, una pareja de lujo.
No se venden ni por todo el oro del mundo
Entiendo que se hable de Cristiano porque en el fútbol lo que cuenta son los goles, pero nadie puede negar que este Madrid sería otro sin dos futbolistas de la talla de Modric y Kroos. Zinedine Zidane y Florentino Pérez lo saben, así que no van a escuchar ofertas por ninguno de los dos. El objetivo es que ambos se retiren vistiendo la camiseta del actual campeón de Europa, motivo por el cual renovaron meses atrás.