Como bien dijo José Mourinho hace unos años, lloraremos cuando se retire Leo Messi. Lo haremos porque no hemos visto a un jugador igual, por mucho que Diego Armando Maradona o Pelé fueran otros fenómenos que para algunos también merecen la consideración de «mejor jugador de la historia».
El argentino lo ha ganado absolutamente todo. Le faltaba un Mundial y lo logró con una selección argentina que no partía en muchas quinielas como favorita, ya que jugador por jugador era claramente inferior a otras selecciones como Francia o Brasil. Sin embargo, se lo propuso y lo consiguió para tapar las pocas bocas que todavía le criticaban por esa obsesión enfermiza de llamarle «pecho frío» o de compararle con Cristiano Ronaldo, algo en lo que el portugués suele salir mal parado.
No seguirá en el PSG
Quien está al día de las últimas noticias de fútbol sabe que Messi no está viviendo su mejor momento a nivel deportivo. Tal vez sea por la edad, aunque en el Mundial dejó claro que todavía le queda algo de fútbol en sus botas. Lo que está claro es que su salida del Barça le dejó muy tocado porque se quería retirar en el club de toda su vida.
El PSG era de los pocos clubes, por no decir el único, que podía hacer frente a su elevada ficha. Se embolsa nada más y nada menos que 30 millones de euros por temporada, y eso que pronto cumplirá 36 años. Se sabe también que no seguirá en el Parque de los Príncipes el próximo curso, así que ya se le coloca en varios clubes en la que podría ser su última etapa como futbolista profesional.
Futuro incierto
Como es lógico, el Barça, donde ha cambiado el juego del fútbol con sus regates y con su infinidad de goles, es el que más interés muestra en hacerse con sus servicios, si bien es cierto que el tope salarial impuesto por LaLiga hace pensar que será muy difícil que Joan Laporta le recupere. Tendrán que deshacerse de jugadores que cobran mucho (Sergio Busquets es uno de ellos y parece que no seguirá). También se habla de la posibilidad de que se vaya a jugar a Arabia Saudí como Cristiano, algo que evidentemente solo haría por dinero. Se rumorea que podría percibir nada más y nada menos que 360 millones de euros por temporada, el doble de lo que percibe ahora mismo el luso en su retiro dorado.
Pase lo que pase, vaya donde vaya, lo que está claro es que seguiremos disfrutando de su magia. Tiene un talento innato que le permite brillar más que el resto y eso es algo que vamos a echar de menos cuando definitivamente cuelgue las botas. Messi es, sin duda, uno de esos futbolistas que hacen que merezca la pena pagar lo mucho que se pide por una entrada al estadio. Y seguro que en el Camp Nou los llenos volverán a estar garantizados si el astro argentino decide ponerse a las órdenes de su amigo Xavi Hernández, quien como es lógico está como loco por verle vestido de azulgrana de nuevo.
