Cuando sí que le aclamaron fue ayer. Logró el gol de la victoria de los Houston Dynamo ante los Real Salt Lake en el tiempo de descuento y lo celebró de una forma muy peculiar. Marcó de penalti reventando el balón y se fue al túnel de vestuarios como si ya diera el partido por acabado. Algunos compañeros le siguieron y otros fueron más prudentes y se quedaron dentro del terreno de juego esperándole. Todo un personaje.