Demasiado está durando la etapa de Brendan Rodgers en el Liverpool. En Inglaterra los aficionados y los directivos tienen mucha paciencia, pero más de uno empieza a temer que pueda pasar lo mismo que en el Arsenal, donde Arsène Wenger no se va ni con agua caliente.
Solo ha tenido un año bueno
Su primera temporada fue bastante mala porque acabó séptimo por detrás del Everton, pero a pesar de ello continuó al frente del equipo. La siguiente fue mucho mejor porque se quedaron a dos puntos de ganar la Premier League, lo que le valió para continuar como mínimo un curso más.
Un año después volvieron a decepcionar porque acabaron sextos y se tuvieron que conformar con jugar la Europa League, una competición que sabe a premio menor para un club que tiene una historia brillante. Por eso este año le están mirando con lupa, y el hecho de acumular cinco partidos sin ganar ha desatado la irá de los aficionados, que este pasado fin de semana pidieron su destitución a gritos.
Quinto pinchazo consecutivo
Fue tras el 1-1 ante el Norwich City, un club de los que aspira a salvarse y gracias. Se adelantaron en el marcador por mediación de Daniel Ings, pero Russell Martin igualó la contienda y encendió las gradas de Anfield. Tras el 6-1 de la última jornada de la pasada Premier ante el Stoke City, no habíamos vuelto a escuchar un aluvión de protestas similar por esos lares.
El equipo ocupa la decimotercera posición de la clasificación con 8 puntos de 18 posibles. Solo han sido capaces de ganar dos partidos y el fútbol que están desplegando es más bien pobre. Parece que la llegada de hombres como Roberto Firmino o Christian Benteke no ha servido para revolucionar una plantilla que lleva demasiado tiempo adormecida.
Partido trampa este miércoles
Veremos qué es lo que sucede este miércoles en la Copa de la Liga. Se enfrentan al modesto Carlisle United, un equipo de la League 2 (equivalente a la Tercera División española). Todo lo que no sea ganar podría provocar la destitución del norirlandés, así que los jugadores pueden hacerle la cama si lo que quieren es perderle de vista.