Boca Juniors se confirmó anoche como el segundo finalista de la Copa Libertadores. El conjunto argentino se medirá al Corinthians brasileño en una final inédita que se disputará los días 27 de junio en La Bombonera y 4 de julio en Pacaembú.
Boca no tuvo problemas para lograr un resultado favorable tras el 2-0 logrado en la ida. Los de Julio César Falcioni hicieron sus deberes e incluso llegaron a dominar en la primera parte. Tuvieron ocasiones claras pero no supieron aprovecharlas.
Tras la reanudación cambió el guión. El desgaste físico hizo mella en los jugadores y la Universidad de Chile se fue al ataque con empuje. Los 50.000 aficionados que abarrotaron el Estadio Nacional de Santiago pusieron de su parte y se vio otro partido.
Dos remates al larguero y la gran actuación de Agustín Orión salvaron a Boca y dejaron el marcador en tablas sin goles. Ahora los ‘xeneizes’ tendrán que rematar la faena llevándose la edición número 53 de la ansiada Copa Libertadores.