En las oficinas del Camp Nou ya se empieza a trabajar en la temporada 2023-2024. Se hace sin demasiada intensidad, como es lógico, porque todavía queda mucho por delante y lo que pase en la actual temporada condicionará las acciones que se puedan llevar a cabo.
Lo que tienen muy claro es que el gran objetivo será Bernardo Silva, futbolista del Manchester City al que no pudieron contratar por la sencilla razón de que no había dinero. Era imprescindible dar salida a otros futbolistas como Frenkie de Jong o Memphis Depay, y como eso no se produjo finalmente no aterrizó en el Camp Nou.
El OK del jugador ya lo tienen
Pep Guardiola no escondió el interés que se sabía que existía. El técnico catalán reconoció que no le iban a retener, pero lo cierto es que al final no llegó ninguna oferta en firme. Xavi Hernández consideraba que era el jugador con el que iba a completar una plantilla de ensueño, pero finalmente tuvo que conformarse con que tiene en estos momentos, que no es poco.
Se sabe que Bernardo Silva tiene ganas de cambiar de aires y triunfar en el Barça, pero antes de que se cerrara el mercado de fichajes ya dejó clara su intención de continuar en el City. No quería esperar a última hora y quería centrarse en su club como buen profesional que es, y eso es lo que hizo aplazando un año su hipotético fichaje.
Será uno de los fichajes más caros de la historia del Barça
El próximo verano pasará lo mismo que ha pasado este verano. El Barça tendrá que traspasar jugadores y dar salida a algunas vacas sagradas como Sergio Busquets, que termina contrato y todo apunta a que no renovará. Quitarse de encima fichas elevadas hará que sea más fácil hacer hueco al internacional luso, que por otra parte no llegará a cualquier precio. La directiva del Barça ya sabe que el traspaso no se cerrará por menos de 100 millones de euros, que es el montante que tienen estipulado para vender a jugadores top que tienen protagonismo. Bernardo lo es y a sus 28 años todavía tiene mucho que ofrecer, así que tiene lógica.