Jesús Navas es ya un jugadorazo hecho y derecho. El joven sevillista ha pasado de ser una promesa a ser uno de los mejores del mundo en pocos años. Hay quienes se atreven a compararlo con Cristiano Ronaldo y Messi, aunque pienso que para eso debería de tener más gol.
Sea como sea, a sus 24 años ya hay varios clubes europeos que sueñan con tenerle en plantilla. Últimamente se ha dado a conocer el interés del Real Madrid y del Barcelona por ficharle, lo que podría desencadenar en una nueva guerra por un jugador entre los clubes más potentes de España (la última fue la de Royston Drenthe y mejor no hablar).
El contrato de Navas no termina hasta el 30 de junio de 2012, por lo que la negociación con José María del Nido es imprescindible. El presidente del Sevilla ha dicho en reiteradas ocasiones que es intransferible, aunque cabe recordar que eso también lo dijo con otros futbolistas como Sergio Ramos, Keita, Poulsen o Dani Alves.
La cláusula de rescisión es de 60 millones de euros y su llegada serviría para descartar el fichaje de Frank Ribéry, tanto en el caso del Barça como en el del Madrid. Sin embargo, dicen que no se quiere mover de Sevilla, pues tiene todavía esos problemas psicológicos que le impedían ir concentrado con la selección española.