Michael Ballack presiente que ya llega su fin como futbolista. El centrocampista del Chelsea ha insinuado que podría colgar las botas tras el Mundial 2010 de Sudáfrica. Cumplirá 33 años este mes y es consciente de que ya le queda poca gasolina. A pesar de ello, sigue siendo titular en la mayoría de los partidos que disputa tanto con el Chelsea como con la selección alemana.
La noticia no ha sentado nada bien en el seno del club londinense. No podrán fichar hasta 2011 y ahora ven como una de sus piezas clave podría dejarles cuando finalice esta temporada. Seguramente le pedirán que siga una más para así poder marcharse al finalizar la 2010-2011, cuando Roman Abramovich ya podrá fichar. Lo peor es que tendrán que mejorarle el contrato a su edad para convencerle.