Gareth Bale se pasa más tiempo lesionado que jugando. Esta temporada le estamos viendo bien sobre el terreno de juego, pero su continuidad suele verse cortada por culpa de los problemas físicos que le han acompañado desde que llegó al Real Madrid procedente del Tottenham.
El galés tuvo que pedir el cambio justo antes de que terminara la primera mitad del partido que les enfrentó al Sporting de Gijón. Había marcado un gol a pase de Toni Kroos y le había dado una asistencia a Karim Benzema, así que estaba siendo una pesadilla para la defensa asturiana.
Mañana sabremos cuántos partidos se pierde
Mañana será sometido a varias pruebas médicas que determinarán el alcance exacto de la lesión. Por ahora sabemos que tiene afectado el sóleo de la pierna derecha, por lo que se perderá un mínimo de tres partidos con casi total seguridad. Eso significa que no le veremos en los duelos ligueros que disputarán ante Betis, Espanyol y Granada.
El objetivo de Zinedine Zidane no es otro que recuperarle para el partido de ida de los octavos de final de la Champions League. El miércoles 17 de febrero visitan el Olímpico de Roma y el galés debería estar listo para aportar su granito de arena.
¿Oportunidad para Jesé?
Tendemos a pensar que siempre que se lesiona un jugador de medio campo hacia arriba se abre una puerta hacia el once titular por la que pueden acceder Isco o James. El malagueño ha entrado en las primeras alineaciones de Zidane, pero el colombiano se está acostumbrando a ver los partidos desde el banquillo, algo que también le pasaba con Rafa Benítez.
Ante el Sporting nos llevamos una sorpresa al ver lo que pasó justo después de que Jesé y James calentaran. El técnico francés apostó por el canario como sustituto de Bale, algo que en parte tiene su lógica si tenemos en cuenta el perfil de uno y otro. ¿Seguirá apostando por él para cubrir la ausencia del ’11’ blanco?