Ya se conoce la decisión del Tribunal Deportivo en el ‘affair’ Vicente Calderón. El Atlético de Madrid tendrá que jugar ante el PSV Eindhoven a puerta cerrada pero no tendrá ninguna sanción más en referencia al posible partido de más que le podía caer. Además, la multa pasará de 150.000 euros a 75.000 por no haberse podido probar los insultos racistas que se presuponían.
Enrique Cerezo, presidente del club rojiblanco, ha recibido la noticia con resignación aunque se mostraba algo contento por la rebaja de la multa y por la anulación de otro posible partido a puerta cerrada.
Si queremos seguir jugando en la Champions League y en la UEFA lo tenemos que aceptar.