Este fin de semana se pudo presenciar un momento muy esperado. Dudu Aouate y Gustavo Munúa, ambos porteros que defendieron la camiseta del Deportivo de la Coruña, no se dieron la mano ayer en el Málaga – Mallorca que vencieron los andaluces por 2-1. El meta israelí del conjunto balear no olvidó los puñetazos que se llevó de su ex compañero y pasó lo más rápido posible para no tener que darle la mano. Después firmó uno de sus peores partidos de la temporada.