Menudo varapalo se ha llevado el bueno de Ander Herrera. El joven centrocampista del Athletic de Bilbao ya se veía jugando en el Manchester United cuando tres supuestos emisarios del club inglés se personaron en la sede de la LFP para pagar su cláusula de rescisión.
Josu Urrutia, presidente del Athletic, se había plantado en los 36 millones de euros que figuran en la misma. No quería traspasar al jugador por los 30 millones que le habían ofrecido y no estaba nada claro que la operación se completara. Como sucedió con Fernando Llorente, se cerró en banda y se negó a negociar.
Fellaini es el elegido por David Moyes
Herrera no había disputado ni un solo minuto en el Santiago Bernabéu porque lo suyo estaba prácticamente hecho, pero al final el Manchester ha ido a por el belga Marouane Fellaini, centrocampista del Everton que les ha costado 32,5 millones de euros.
Para el jugador vasco es una muy mala noticia en todos los aspectos. Jugar en Old Trafford era uno de sus sueños y cobrar más de 3 millones de euros por temporada era algo que le seducía. Ya se había hecho a la idea, pero ahora tendrá que volver a los entrenamientos en Lezama y luchar por objetivos más ambiciosos con los que son sus compañeros desde que llegó en 2011 procedente del Zaragoza.
De Bilbao solo te puedes ir si te fugas como Javi Martínez
La parte buena es que en el Athletic seguirá siendo titular indiscutible, algo que iba a ser más complicado en la Premier League. Tal vez tendrá que esperar a que finalice su contrato (firmó por 5 temporadas) para marcharse a otro equipo. Su cláusula es de 36 millones, pero en sus dos últimos años de contrato se elevará a 40 millones porque eso es lo que firmaron en su día.
Veremos cómo se recupera anímicamente de todo esto. Ahora tiene unos días para descansar, ya que el próximo partido de Liga lo jugará el lunes 16 de septiembre ante el Celta de Vigo.