El sueño de Ander Herrera por fin podrá hacerse realidad. En agosto de 2013 estuvo a punto de cumplirse, pero el Athletic de Bilbao se negó a traspasarle y el Manchester United no quiso pagar lo que los vascos pedían por el jugador, que no era otra cosa que la cláusula de rescisión. Por eso al final se decantaron por Marouane Fellaini, que llegó procedente del Everton por 27,5 millones de libras, más o menos lo que costaba el centrocampista español.
Pondrá parte de su salario para hacerlo posible
Esta vez no habrá sorpresas de última hora y Ander podrá vestir la camiseta de los «diablos rojos«. Todavía no se ha cerrado el traspaso porque el Athletic ha rechazado la oferta que han presentado los ingleses, algo que se han encargado de comunicar a través de una escueta nota que encabeza la portada de su página web. Pero a pesar de ello, el jugador pagará parte de su traspaso y éste será oficial dentro de unas horas si no pasa nada raro.
Importante salto deportivo y económico
Ha decidido contribuir aportando parte de su salario porque ahora cobrará mucho más y estará en uno de los grandes de Europa. Los medios de comunicación ingleses dicen que percibirá entre 60.000 y 110.000 euros semanales, lo que equivale a una ficha anual que oscilaría entre los 3 y los 6 millones de euros. La discrepancia es importante, así que tendremos que esperar un poco más para saber cuánto va a mejorar su cuenta corriente en los próximos cinco años, puesto que va a firmar un contrato que no expirará hasta el 30 de junio de 2019.
36 millones de euros
La operación se cerrará por 36 millones de euros, que es lo que figura en su cláusula de rescisión. El centrocampista bilbaíno, que en agosto cumplirá 25 años, ya ha viajado a Inglaterra para visitar las instalaciones del club en Carrington, que es donde entrena el equipo que dirigirá Louis van Gaal tras el Mundial de Brasil. Allí ha podido saludar a los empleados del club que todavía están trabajando y se ha empezado a familiarizar con la que será su nueva casa.