Visto lo visto en el partido de ida disputado en el Santiago Bernabéu, a nadie debería sorprenderle lo que sucedió anoche en el Stadion Wojska Polskiego de Varsovia, donde el Legia fue capaz de remontar un 0-2 en contra para darle un buen susto al Real Madrid, que acabó empatando el partido cuando estaba más tocado.
El resultado final, 3-3, deja a los blancos en la segunda posición de su grupo con dos puntos menos que el Borussia Dortmund, que sí hizo los deberes y ya está en octavos de final de la Champions League.
Demasiada relajación
A Zinedine Zidane le van a tomar el pelo más de una vez. Es el típico entrenador enrollado que se lleva muy bien con sus jugadores, algo parecido a lo que veíamos en la figura de Carlo Ancelotti. Eso de primeras es muy bueno, pero la confianza ya sabemos que da asco. Con el paso de los meses el rendimiento decae porque los futbolistas no salen con la tensión necesaria.
Bale y Benzema vieron puerta
Anoche podía pasar. Un rival inferior, un campo sin espectadores y una clasificación muy encarrilada no me hacía pensar que íbamos a ver al Madrid más agresivo de todos los tiempos. Todavía menos cuando se adelantaron en el minuto 1 gracias a un golazo de Gareth Bale, que empalmó un balón que había peinado Cristiano Ronaldo para sorprender al meta local.
Karim Benzema, que jugó junto a Álvaro Morata, hizo el 0-2 superado el ecuador de la primera parte. Aprovechó una buena asistencia de Bale y recuperó parte de la confianza que ha perdido en este inicio liguero.
Remontada sonrojante
Daba la sensación de que el Madrid volvería a golear sin más, pero los polacos no se vinieron abajo y recortaron distancias antes del descanso por mediación de Odjidja, que la puso en la mismísima escuadra en el minuto 40 aprovechando la pasividad de los jugadores españoles, que le dejaron maniobrar con una facilidad pasmosa a escasos metros del área.
Tras el descanso la empanada continuó y Radovic sorprendió a un Keylor Navas que pudo hacer algo más para evitar el 2-2 en el minuto 58. La estocada, que no fue mortal, se produjo en el minuto 83, cuando Moulin remató a las mil maravillas un balón que recibió para rematar sin oposición en la frontal del área. Los de Zidane no se lo podían creer.
Kovacic evitó la derrota
Mateo Kovacic acudió al rescate dos minutos después aprovechando una gran asistencia de Dani Carvajal, que se la puso de tacón para que rematara libre de marca. Ajustó el balón al poste y evitó taponó la herida.
El Borussia Dortmund venció por la mínima
El Sporting de Lisboa tratará de aferrarse a las pocas opciones que tiene para clasificarse. Anoche cayeron en el Signal Iduna Park por culpa de un solitario gol de Adrián Ramos, que aprovechó la baja de Pierre Emerick Aubameyang para reclamar un sitio en el equipo. El colombiano vio puerta en el minuto 12 y el marcador no se volvió a mover. El Sporting fue demasiado tarde a por el partido y el Borussia Dortmund supo frenar sus acometidas.
Así está el grupo F
Borussia Dortmund: 10 puntos
Real Madrid: 8 puntos
Sporting de Lisboa: 3 puntos
Legia de Varsovia: 1 punto