El Bayern de Múnich se ha dejado los deberes para el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League. No fue capaz de vencer en Donetsk y le tocará ganar en el Allianz Arena si quiere continuar vivo en la competición.
Lejos de jugar un gran partido, los hombres dirigidos por Pep Guardiola se atascaron en más de una ocasión y se quedaron con un diez sobre el césped desde el minuto 65. Xabi Alonso vio dos tarjetas amarillas y no podrá ayudar a sus compañeros dentro de 15 días.
Excelente actitud defensiva del Shakhtar
El Shakhtar hizo las cosas como debía. Dejó a un lado la etiqueta de equipo súper ofensivo que se ha ganado en los últimos años y tiró de solidaridad defensiva para dejar su portería acero. Era uno de los objetivos de Mircea Lucescu, que desde el banquillo veía las cosas mejor de lo que podía imaginar, sobre todo teniendo en cuenta que los bávaros venían de golear por 8-0 al Hamburgo días atrás.
Arjen Robben llegó a generar peligro, pero sus clásicas internadas por la banda no se concretaron. Franck Ribéry no estuvo demasiado fino y a Thomas Müller tampoco se le vio muy activo. Robert Lewandowski fue suplente y no saltó al césped del Donbass Arena hasta el minuto 75, cuando sustituyó a un Mario Götze que tampoco pudo brillar.
Así las cosas, la eliminatoria está totalmente abierta. Un gol del Shakhtar en el Allianz Arena podría hacer mucho daño a los alemanes, así que viviremos uno de esos duelos en los que no puedes especular.