Aunque en la imagen que puedes ver sobre estas líneas se le dibuja una sonrisa de enamorado, Nuria Cunillera puede estar tranquila. Xavi Hernández se casó con ella en Blanes hace poco más de un año y no entra en sus planes el divorcio, por lo menos por ahora. El único divorcio que se le viene a la cabeza es el futbolístico, el mismo que estuvo a punto de dejarle fuera del nuevo proyecto de Luis Enrique este pasado verano.
El de Terrassa decidió continuar en el club de toda su vida, pero todo parece indicar que su compromiso no irá más allá de esta temporada. Tiene demasiadas novias como para seguir, y su protagonismo, aunque ahora vuelva a ser titular, irá disminuyendo con el paso de los meses. Imagino que ‘Lucho’ apostará por Ivan Rakitic en la recta final de la temporada, que es cuando un equipo se la juega de verdad.
Su futuro está cada vez más lejos de casa
Con 34 años no se le puede pedir que juegue al mismo nivel que hace dos o tres temporadas. Su mejor época ha pasado y por eso ha dejado la selección. Casi deja el Barça, pero al final le convencieron. Le llamaron de Estados Unidos y también de Qatar, pero no hubo manera. Ahora su teléfono vuelve a sonar, pero esta vez todavía entiende menos lo que le están diciendo. Le hablan en japonés.
El FC Tokyo está dispuesto a pujar fuerte. Quieren ofrecerle un sueldo anual de 7 millones de euros, toda una fortuna que ningún otro club estaría dispuesto a pagarle analizando concienzudamente su presente y su futuro profesional. Eso sí, le reclaman para marzo de 2015, que es cuando arrancará la próxima temporada por esos lares. En estos momentos son séptimos en la primera división japonesa y buscan un estímulo para enganchar a los aficionados y convertirse en un equipo ganador.
La última palabra, como siempre digo en estos casos, la tendrá el jugador.