La Premier League está muy emocionante. El Manchester United volvió a tropezar y el Liverpool ahora puede meterle más miedo que nunca. El Chelsea no aprovechó la oportunidad de acercarse porque también perdió a domicilio ante un enrachado Tottenham.
Los «diablos rojos» no están atravesando su mejor momento de la temporada. Con todo a su favor para hacer olvidar la derrota por 1-4 ante el Livepool, los hombres de Sir Alex Ferguson perdieron por 2-0 en campo del Fulham, un equipo que siempre es difícil de ganar en su estadio.
El partido pronto se puso muy cuesta arriba. Paul Scholes evitó un gol con las manos y se fue a la calle en el minuto 17. Danny Murphy transformó la pena máxima y con el 1-0 se llegó al descanso. Tras la reanudación, cuando mejor lo estaba haciendo el Manchester, un contragolpe supuso la sentencia definitiva con un gol del húngaro Zoltan Gera a falta de 3 minutos para la finalización. Además, Wayne Rooney fue expulsado y podrían sancionarle con varios partidos por encararse con el colegiado y amenazarle con el dedo índice.
El Chelsea tampoco estuvo brillante en el día de hoy y perdió por la mínima en su visita al White Hart Lane. El gol del Tottenham fue obra del croata Luka Modric gracias a un ajustado disparo en el minuto 50. Por ello, el Chelsea sigue a cuatro puntos del Manchester con un partido menos y el Liverpool está también a cuatro pero con los mismos partidos que los líderes.