Unai Emery se ha despedido del Villarreal muy emocionado. No ha podido rechazar la oferta del Aston Villa como sí lo hizo con la del Newcastle. Considera que ha llegado el momento idóneo de empezar una nueva etapa y no ha querido esperar a finalizar la temporada, más que nada porque a los ingleses les urge contar con un entrenador de nivel tras la destitución de Steven Gerrard.
Adiós con honores
El técnico vasco ha dado una rueda de prensa junto a Fernando Roig y Fernando Roig Negueroles para despedirse de la afición. Ha reconocido sentirse como en casa desde que llegó y dice que se marcha con la sensación de haber cumplido el objetivo, ya que conquistó la Europa League y llegó a las semifinales de la pasada edición de la Champions League dejando por el camino a gigantes como el Bayern de Múnich.
No ha sido desde luego una decisión personal, sino que se debe a algo profesional. Tenía una cláusula de rescisión de 6 millones de euros y sabía que algún día podría llegar una oferta importante. Fernando Roig también lo sabía, pero ha reconocido que les ha pillado un poco a pie cambiado, a pesar de que están muy agradecidos con Emery y le desean lo mejor de lo mejor en su carrera profesional.
Un contrato irrechazable
Emery no ha querido hablar por el momento del desafío de entrenar al Aston Villa. Dice que lo hará a partir de mañana, que es cuando se supone que será presentado como nuevo entrenador de los villanos. Antes se despedirá de toda la plantilla y cerrará una etapa exitosa antes de volver a Inglaterra, donde no le fue nada bien cuando entrenó al Arsenal.
Más allá del ambicioso proyecto deportivo que le hayan podido plantear, la propuesta que tenía sobre la mesa no se podía rechazar así como así. Más que nada porque firmará un contrato de cinco temporadas a razón de 7 millones de euros por cada una de ellas.