El Arsenal sigue en lo más alto de la clasificación de la Premier League tras la victoria cosechada ayer en campo del Brentford. Los de Mikel Arteta, que tienen como objetivo terminar entre los cuatro primeros de la clasificación, no van a renunciar a ganar la competición visto lo visto, ya que esta temporada han cambiado mucho las cosas gracias a futbolistas como por ejemplo Gabriel Jesús, al que le ha sentado muy bien mudarse de Mánchester a Londres.
Victoria por la vía rápida y debut inesperado
Su último triunfo refuerza esa convicción de que el Arsenal puede hacer cosas muy grandes si se lo propone. Es cierto que tiene una plantilla muy joven y que hay quienes creen que tarde o temprano les temblarán las piernas si se ven muy arriba, pero no menos cierto es que les sobra calidad.
Saliba adelantó a los ‘gunners’ en el minuto 17 con un cabezazo que entró tras golpear en el poste. Al árbitro le llegó un aviso de que el balón había entrado, ya que el portero local logró despejarlo justo después de que traspasara la línea de gol y había dudas.
Más tarde apareció Gabriel Jesús, también con un gran gol de cabeza. El brasileño, que está en un gran estado de forma y ansía ser el máximo goleador de la Premier a pesar de Haaland, conectó marcó muy bien los tiempos y puso tierra de por medio sacando a relucir su clásico teléfono manual.
Ya en la segunda mitad, cuando el Brentford trataba de recortar distancias lo antes posible, Fábio Vieira se sacó un latigazo de la chistera que se coló tras golpear el poste izquierdo de la portería local. Con ese tanto sentenciaron el partido y se dedicaron a disfrutar de los últimos minutos. De hecho, Arteta se permitió el lujo de dar entrada a Ethan Nwaneri, que apareció en el tiempo de descuento para convertirse en el debutante más joven de la historia de la Premier con 15 años y 181 días, desbancando de esta forma a Harvey Elliott, jugador de 19 años del Liverpool.