Más de uno y más de dos sabían que Neymar no sería capaz de echar raíces en París. Se dejó llevar por el dinero, pero el dinero no lo es todo en la vida. Ahora está arrepintiéndose de haber dejado el Barça para jugar en el PSG, un club muy poderoso que no es capaz de darle todo lo que pide para ser feliz.
A continuación esgrimo las 4 razones por las que el brasileño no es feliz en su nueva casa.
La liga francesa le aburre
No hacía falta ser muy listo para saber que la liga francesa no es como la española. El nivel es mucho más bajo porque apenas hay cuatro o cinco equipos con cara y ojos. De hecho, el PSG está arrasando y golea a los más débiles de la Ligue 1. Eso te puede hacer gracia durante un par o tres de semanas, pero al final pierdes la motivación que todo futbolista de primer nivel necesita para no dejarse llevar por la relajación.
No se lleva bien ni con Cavani ni con Emery
Neymar hace buenas migas con jugadores como Thiago Silva o Dani Alves, pero no se puede decir lo mismo de Edinson Cavani, con quien tuvo un rifirrafe a la hora de lanzar un penalti que dio mucho que hablar. Se suponía que los ánimos se habían calmado y ambos jugadores han quitado hierro al asunto públicamente, pero todo el mundo sabe que no existe una buena relación. Además, parece que no existe feeling entre Neymar y Unai Emery. El técnico vasco es bastante metódico y eso no gusta al ex del Barça, que prefiere un fútbol más anárquico.
Le sentó fatal que sus propios aficionados le pitaran
Sucedió días atrás cuando Cavani podía convertirse en el máximo goleador de la historia del PSG. El árbitro señaló el punto de penalti con el partido más que sentenciado y Neymar no se conformó con los tres goles que ya había marcado. Quiso lanzar la pena máxima y el público del Parque de los Príncipes se lo recriminó. Los pitos se escucharon claramente y el ’10’ se fue cabizbajo, con cara de pocos amigos. Difícilmente lo olvidará.
El Real Madrid es una tentación
A todo lo anterior hay que sumar el interés del Real Madrid. Es una locura pensar que Neymar se irá el próximo verano habiendo costado 222 millones de euros, pero el mundo del fútbol es capaz de sorprendernos y Florentino Pérez podría cometer una locura con tal de cumplir un sueño que ya se le escapó años atrás. Eso sí, para que su contratación sea posible Cristiano Ronaldo tiene que hacer las maletas, ya que es imposible soportar dos sueldos elevadísimos. De hecho, Ney cobra mucho más que CR7, que bajo ningún concepto aceptaría seguir en la plantilla sin ser el mejor pagado.