Fichar a Cristiano Ronaldo es tentador, muy tentador. Sobre todo si eres el Manchester United y recuerdas las seis grandísimas temporadas que firmó allí antes de fichar por el Real Madrid. Sin embargo, un directivo no puede tomar decisiones basándose solo en el corazón. Debe ser más frío y escuchar a su cabeza. Y eso es justo lo que podría frenar la vuelta de CR7 a Old Trafford.
No le van a renovar y ya escuchan ofertas
Florentino Pérez está dispuesto a escuchar ofertas. No va a renovarle para cobrar lo mismo que Leo Messi, lo cual tiene mucha lógica. Ni es tan decisivo como el argentino ni tiene la misma edad. No hay que olvidar que en febrero cumplirá 33 años, así que su fecha de caducidad no está tan lejos.
Su rendimiento esta temporada está siendo más que discreto y por primera vez hay consenso en el Santiago Bernabéu: Cristiano es transferible. No merece la pena seguir apostando por un jugador que solo piensa en cobrar más. Es verdad que se ha convertido en el mejor de la historia del club con el permiso de Alfredo Di Stéfano, pero no menos cierto es que su futuro ya no es tan prometedor.
El problema es de dinero
Así las cosas, las negociaciones con el United podría intensificarse en los próximos meses para que el fichaje cuajara a partir de junio. Al luso le seduce la idea de volver a enfundarse la camiseta de los «diablos rojos» y es cuestión de llegar a un acuerdo económico para que eso suceda.
El problema es precisamente ese. El Madrid pide 100 millones de euros con los que recuperaría la inversión que llevó a cabo en su día, mientras que Cristiano podría exigir 50 kilos netos, que es lo que dicen que cobrará Messi después de ampliar su contrato con el Barça. Demasiado dinero para un grandísimo goleador que más pronto que tarde verá los partidos desde la grada.