Paulo Dybala se coronó en el partido de ayer. Por si había alguna duda sobre su talento, el argentino tiró del carro de la Juventus para dejar al Barça con un pie y medio fuera de la Champions League. Suyos fueron los dos primeros goles que minaron la moral de los catalanes.
Robert Fernández le sigue la pista y Florentino Pérez también piensa en él como futuro galáctico, aunque en las últimas semanas se ha hablado más de Eden Hazard. Lo que está claro es que a cualquier club del mundo le gustaría contar con un jugador tan resolutivo.
Portazo a los rumores de salida
La Juventus hará un esfuerzo por mejorar su contrato, que en estos momentos expira el 30 de junio de 2020. Para eso todavía queda, pero los italianos están dispuestos a incrementar su ficha considerablemente para establecer una cláusula de rescisión que les permita vivir tranquilos.
Dybala, por su parte, parece estar dispuesto a quedarse, o al menos eso es lo que se desprende de sus declaraciones tras la victoria de anoche:
Estoy muy feliz en la Juventus, mi renovación está muy cerca y quiero aprovechar lo que estoy viviendo acá, voy a tratar de dar mucha felicidad a mis hinchas.
Un proyecto deportivo ambicioso y un sueldo a la altura convencerán al de Laguna Larga, que a sus 23 años no debería tener prisa por abandonar la Juventus para jugar en España o Inglaterra. Si se siente a gusto y cuenta con la confianza del entrenador, lo mejor que puede hacer es continuar defendiendo la camiseta ‘bianconera’.
¿El nuevo Messi?
Dicen que Dybala es lo más parecido a Messi que hemos podido ver. Creo que es pronto para decirlo y que Messi solo hay uno. Sin embargo, tiene mucho margen de mejora y no se puede negar que su fútbol es de muchos quilates. Por eso Andrea Agnelli hará lo que sea necesario para que lidere a una Juventus que quiere volver a reinar en Europa.