El Sevilla está de despedidas. El pasado martes dijo adiós a la Champions League y ayer dijo adiós a LaLiga. A este paso van a llegar a la Feria de Abril sin ganas de fiesta.
Los de Jorge Sampaoli no fueron capaces de tumbar a un Atlético de Madrid que quiere la tercera plaza. No es lo mismo acabar tercero que cuarto, ya que evitas tener que jugar la fase previa de la Champions, la misma que dejó en la cuneta al Villarreal el pasado verano.
Marzo está siendo un mes complicado
Los del Cholo Simeone se han situado a dos puntos de los andaluces recortando siete en tres jornadas. Fueron superiores y merecieron ganar, algo que hicieron por 3-1 gracias a los goles de Diego Godín, Antoine Griezmann y Koke. El tanto de los sevillistas fue obra de Joaquín Correa cuando ya estaba todo el pescado vendido.
Les toca reponerse en la próxima jornada ganando al Sporting de Gijón en casa. Por plantilla son muy superiores, pero los asturianos están muy necesitados de puntos y no será un partido plácido. Todavía menos lo será el que jugarán tres días después, ya que visitan el Camp Nou para enfrentarse a un Barça que sueña con arrebatarle LaLiga al Real Madrid.
Demasiado lejos de la pelea
Los catalanes tienen 6 puntos más que el Sevilla y el Madrid tiene 8 más con un partido menos. De ahí que sea muy difícil ver a los de Sampaoli levantando un título que suele estar reservado para los dos grandes de España, los que tienen más potencial económico.
Veremos si el técnico argentino es capaz de recuperar a los suyos a nivel anímico. Tienen la sensación de que han perdido dos competiciones en menos de una semana y eso es un palo, ya que estaban firmando una temporada fantástica.