Se acabó la incertidumbre sobre el central que quiere fichar el Manchester City. La futura baja de Vincent Kompany, que no entra en los planes de Pep Guardiola, les ha obligado a moverse en busca de un jugador de garantías, y al parecer es Aymeric Laporte el que va a vestir la camiseta de los ‘citizens’ a partir del próximo curso.
Negociar es perder el tiempo
Ernesto Valverde no podrá contar con el francés porque los jeques van a venir con los 50 millones de euros que figuran en su cláusula de rescisión. Ya saben cómo se las gasta Josu Urrutia y ni siquiera le han llamado para negociar. El currículum del presidente del Athletic de Bilbao asusta si nos fijamos en los últimos traspasos. Fernando Llorente no se movió hasta que acabó su contrato, Javi Martínez se fue al Bayern de Múnich por 40 millones y Ander Herrera al Manchester United por 36 millones.
Primer deseo concedido
La última renovación de Laporte, el pasado mes de junio, situó su cláusula en una cantidad que parecía difícil que algún club pudiera pagar. Sin embargo, el hecho de tener 21 años y más de tres temporadas de experiencia en Primera División ha empujado a Txiki Begiristain y Ferran Soriano, que han aprobado uno de los objetos de deseo de Guardiola para que el City sea un equipo todavía más temible.
No será un traspaso cualquiera
Imagino que la noticia no se hará oficial hasta que la temporada esté a punto de terminar y ambos clubes no se jueguen absolutamente nada. El depósito de la cláusula de rescisión será el desencadenante de un par de comunicados oficiales que anunciarán la venta más suculenta de la historia del Athletic y el tercer fichaje más caro de la historia del City, solo superado por Raheem Sterling y Kevin De Bruyne.