Cuando lo hace mal lo decimos, y cuando lo hace bien también lo decimos. Cristiano Ronaldo es uno de los mejores jugadores del planeta y eso es indiscutible. Con exhibiciones como la del pasado sábado acaba con todas las críticas de un plumazo, aunque sigo pensando que lo mejor que puede hacer el Real Madrid es traspasarlo este verano.
La mejor forma de reivindicarse
El portugués lideró la goleada de su equipo ante el Celta por 7-1. Marcó cuatro goles y fue ovacionado por un Santiago Bernabéu que a pesar de ello empieza a tener dudas sobre su rendimiento.
Deleitó a los aficionados con dos zapatazos lejanos con los que abrió su cuenta goleadora, y la cerró empujando un pase de Isco y cabeceando un centro de Jesé. Podríamos decir que se fue casi tan contento como cuando le metió un ‘hat-trick’ al Espanyol en aquella jornada en la que el Madrid perdió la Liga.
A por otra Bota de Oro
En estos momentos es el máximo goleador de la Liga y el primer clasificado en la lucha por la Bota de Oro, un galardón al que siempre le da mucha importancia. Ya sabemos que a CR7 las distinciones individuales le importan mucho porque necesita alimentar su ego, así que hará todo lo posible por acabar como máximo goleador europeo. Ahora mismo lleva 27 goles, uno más que Gonzalo Higuaín, Luis Suárez y Jonas.
Zinedine Zidane elogió su capacidad de golpeo durante la rueda de prensa posterior al duelo ante el Celta. Sabe que es su mejor baza para ganar la Champions y debe cuidarle al máximo. Eso sí, no le va a poder reservar en Liga porque Cristiano quiere la Bota de Oro, así que ya veremos cómo llega a los partidos decisivos.
Tras el encuentro, Florentino Pérez le regaló una camiseta que conmemora su gol número 350 con la camiseta del Madrid, algo que puedes ver en el vídeo que se muestra a continuación.