Cambio de objetivo en el PSG tras conocerse la sanción de la FIFA. Según L’Équipe, el club más poderoso de Francia descarta fichar a Cristiano Ronaldo a sabiendas de que el Real Madrid no va a querer desprenderse de su estrella a corto plazo. El hecho de no poder fichar hasta 2017 (veremos si al final pueden hacerlo este verano gracias a una cautelar como la que pidió el Barça) ha hecho que Nasser Al-Khelaïfi se centre en el fichaje de Neymar, que a decir verdad puede aportar mucho más teniendo en cuenta su juventud (23 años).
Sería el fichaje más caro de la historia con diferencia
Cristiano les iba a salir caro, pero es que Neymar cuesta todavía más. El brasileño tiene contrato con el Barça hasta el 30 de junio de 2018 y su cláusula de rescisión es de 190 millones de euros, una auténtica burrada que no creo que estén dispuestos a pagar.
Renovación en curso
Lo que pueden aprovechar es la indecisión del futbolista, que todavía no ha renovado pese a reunirse en varias ocasiones con los directivos azulgranas. Le han propuesto ampliar su contrato hasta 2021 cobrando 15 millones de euros netos por temporada, que es mucho más de lo que percibe ahora y le sirve para convertirse en el segundo mejor pagado de la plantilla, solo superado por Leo Messi.
El problema es que el PSG puede ofrecerle 20 millones de euros netos por curso, además de otros variables en función de los títulos conseguidos. Es una cantidad que el Barça no puede igualar, entre otras cosas porque tendría que subir otros salarios y la cosa se les iría de las manos.
A gusto en el Camp Nou, pero quién sabe…
A favor del Barça juega el hecho de que Neymar es muy feliz en Barcelona y se siente muy cómodo con sus compañeros. El único aspecto que le tira para atrás es el de los temas extradeportivos. Eso de tener que pasar por el juzgado es algo que no le hace especial ilusión.
Sea como sea, el capitán de la canarinha saldrá ganando. Si se va al PSG cobrará una cantidad indecente de dinero, y si se queda en el Barça lo podrá hacer apretando su salario hacia arriba por el simple hecho de presentar el contrato que le ofrecen por trabajar en Francia.