Es normal que un jugador como Neymar tenga ofertas de otros clubes todos los años. Por eso no debería sorprendernos lo que ha dicho su padre en un programa de la televisión brasileña.
El Manchester United vino a por él durante el pasado verano con la esperanza de llevárselo previo pago de una cantidad récord en el mundo del fútbol. Sin embargo, el Barça se opuso a su traspaso y no hubo nada más que hablar.
Con contrato y con ganas de continuar
Le quedan tres años de contrato y forma parte de un tridente mágico que nadie en Can Barça quiere desmontar. De hecho, el jugador es feliz y tampoco accedió a negociar con los diablos rojos, aunque se llegó a decir que aceptaría la propuesta para convertirse en el referente de un grande de Europa. No hay que olvidar que en el Barça, le guste o no, sigue viviendo a la sombra de Leo Messi en lo que a protagonismo y atención mediática se refiere.
Martial era el plan B
Tras obtener un rotundo «no» por respuesta, los directivos del club inglés se movieron con rapidez para satisfacer el último deseo de un Louis van Gaal que es especialista en pedir fichajes caros. La alternativa era Anthony Martial, un chico de 19 años que generó escepticismo a raudales entre los aficionados. Sin embargo, con el paso de los días nos ha demostrado que está preparado para triunfar en la Premier League. Sin ir más lejos, gracias a los tres goles que ha logrado hasta la fecha, ha sido nombrado mejor jugador de la competición en septiembre.