En el mundo del fútbol no hay nada definitivo. Y si no que se lo pregunten al Borussia Dortmund, que tras las fugas de Mario Götze y Robert Lewandowski se ha especializado en convencer a sus cracks para que se queden.
Primero lo lograron con Marco Reus, que tenía un pie y medio fuera y al final firmó un nuevo contrato que ya veremos lo que dura. El siguiente fue Mats Hummels, que ha renunciado a varias ofertas importantes para seguir en el Signal Iduna Park. Y ahora, cuando todo el mundo daba por hecho que cambiaría de aires, podría ser el turno de Ilkay Gündogan.
Ya no tiene tan claro que se vaya a marchar
El centrocampista alemán de origen turco no ha querido jugar al despiste. Desde que terminó la temporada reconoció que su intención es la de cambiar de aires, pero parece que las ofertas que le han planteado no le seducen lo suficiente.
Tal vez sea un problema económico. Sus pretensiones son demasiado ambiciosas y ya sabemos que se ha llevado algún que otro portazo por pedir más de lo que merece. En lo deportivo también tiene dudas porque en ningún grande le aseguran la titularidad. Es el caso del Barça, donde estaría condenado a la suplencia teniendo en cuenta que la posición de pivote defensivo la ocupa Sergio Busquets.
Tuchel ha hablado con él
Su tío y representante ha reconocido que en estos momentos no es nada descabellado pensar que va a continuar. Tiene contrato hasta el 30 de junio de 2016 y quiere recuperar su mejor nivel para poder dar el salto a un grande de Europa con más garantías. Y para ello no hay nada como jugar en la que ha sido tu casa durante los últimos años. Thomas Tuchel, el sucesor de Jürgen Klopp, ya ha hablado con él para convencerle de que lo mejor que puede hacer es quedarse.