Sonó para engordar las filas del Levante, pero al final no le veremos en España. Alberto Gilardino ha dado por finalizada su corta etapa en China para regresar a su país. La Fiorentina le ha convencido con un proyecto más ambicioso que el de la entidad presidida por Quico Catalán, que como sabes en estos momentos ocupa la penúltima posición de la clasificación.
Un refuerzo para ir a por el Nápoles
Muy distinto es lo que le sucede a los de Florencia. Son sextos y están a cinco puntos de la tercera plaza que ocupa el Nápoles, la que te da derecho a jugar la Champions League superando una fase previa.
Buscaban un refuerzo para la delantera y lo han encontrado en un tipo que conoce la Serie A al dedillo. Gilardino ha jugado en hasta siete equipos italianos distintos, entre ellos la Fiorentina. Allí pasó algo más de tres temporadas después de abandonar el Milan, donde nunca llegó a ser un delantero ‘Top’. Fue entre 2008 y 2012 cuando defendió los colores de la entidad viola.
Tendrá que sudar para ser titular
Viene de ganar la Super Liga de China y tratará de aportar experiencia y goles a un equipo que está haciendo las cosas bastante bien. En el Artemio Franchi saben de lo que es capaz, y su técnico, Vincenzo Montella, confiará en él para afrontar el tramo final de la temporada. Eso sí, tendrá competencia, puesto que días atrás se incorporó a los entrenamientos Alessandro Diamanti, otro veterano delantero italiano que llega procedente de China, aunque en este caso en calidad de cedido por el Guangzhou Evergrande.
Ahora mismo los puntas que se están repartiendo los minutos son Mario Gómez y Khouma Babacar, que a estas alturas han disputado 14 partidos en la Serie A. Giuseppe Rossi sigue lesionado.