Emelec se proclamó anoche campeón de la liga ecuatoriana tras ganar al Barcelona de Guayaquil por 3-0 en el partido de vuelta de la gran final. En la ida habían empatado 1-1, así que los eléctricos se llevaron el título con total merecimiento.
Los visitantes jugaron con un hombre menos durante 80 minutos por culpa de la tempranera expulsión de Álex Bolaños, que vio dos tarjetas amarillas en diez minutos y tuvo que irse a la ducha para calmar su calentón. Lo más sorprendente de todo es que las dos entradas las cometió sobre su hermano pequeño, Miler Bolaños, a quien estuvo a punto de lesionar de gravedad.
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En el minuto 5 le dio bien, pero en el minuto 10 casi le arranca la pierna. El colegiado no se lo pensó dos veces y le sacó la segunda cartulina amarilla, aunque si le hubiera sacado la roja directamente no hubiera pasado absolutamente nada. Llegó a destiempo y se fue al suelo con mucha fuerza, con ganas de destrozarle las piernas a su hermano.
Miler se recuperó de semejante entrada y terminó siendo decisivo, ya que marcó los dos últimos goles de su equipo en la recta final. Antes Ángel Mena había adelantado al Emelec en el minuto 27.
Al término del partido, el presidente del Barcelona de Guayaquil, Antonio Noboa, no tardó demasiado en escribir un mensaje en su cuenta de Twitter (@tononoboa) para insinuar que Bolaños no continuará en el club el año que viene por lo que hizo:
Gracias a la hinchada de Barcelona por el apoyo… Es claro que un jugador dañó la fiesta… Ese jugador está fuera de Barcelona.