La selección holandesa ya está en cuartos de final. Después de una fase de grupos inmaculada en la que solo sufrió ante Australia, los de Louis van Gaal han sido capaces de ir un paso más allá después de remontar un partido que tenían perdido en el minuto 87. Fue entonces cuando apareció Wesley Sneijder para establecer el empate que parecía definitivo, pero en el tiempo de descuento llegó el 2-1 de Klaas Jan Huntelaar, que como suele ser habitual no falló desde el punto de penalti. Fue un final cruel para los aztecas, pero el fútbol a veces tiene estas cosas.
Primera parte para la tricolor
La primera parte de los tulipanes no fue buena. México tuvo varias ocasiones claras para adelantarse en el marcador, pero la falta de puntería y las intervenciones de Cillessen lo evitaron. La más clara de los europeos llegó en un error que a punto estuvo de aprovechar Arjen Robben, que recibió de Robin van Persie y se plantó ante el Memo Ochoa, a quien no pudo superar porque fue claramente derribado dentro del área. El portugués Pedro Proença no vio nada y así se llegó al descanso.
Tras la reanudación más de lo mismo. Los hombres de Miguel Herrera salieron más concentrados y Giovani dos Santos se inventó un golazo desde fuera del área. La enganchó con potencia con su pierna izquierda y Cillessen no fue capaz de desviar el balón. Era un 0-1 totalmente merecido, pero a partir de ese momento todo cambió.
Cambio de chip en Holanda
Cambió porque México se echó atrás y Van Gaal empezó a mover fichas. Arriesgó un poco más e hizo cambios que le cambiaron la cara al equipo. Las ocasiones no tardaron en llegar, pero Memo Ochoa estuvo simplemente espectacular, tanto o más como el día de Brasil. Evitó goles a bocajarro y se lució con estiradas espectaculares, pero en el minuto 87 no pudo hacer nada para repeler un obús de Sneijder. El centrocampista del Galatasaray golpeó con mucha potencia un balón que se había quedado muerto casi en la frontal del área.
Penalti decisivo
La locura holandesa llegó en el tiempo de descuento, cuando Robben tiró de veteranía para engañar a otro veterano. Rafa Márquez derribó al habilidoso extremo del Bayern de Múnich y esta vez Proença no se lo pensó dos veces. Señaló el punto de penalti para que Huntelaar clasificara a los suyos en un tramo final frenético.
Sobre el penalti se está hablando mucho. Lo que me sorprende es que Robben haya pedido perdón por tirarse en el primer penalti, cuando en realidad me parece más piscinazo el del penalti decisivo. En la primera parte le derribaron claramente.