El Barça echó de menos a Leo Messi en La Rosaleda. Sin el argentino, y con Neymar en el banquillo una vez más, no hubo magia alguna. Lo que sí hubo fue oficio para lograr tres puntos que hacen que el equipo del Tata Martino se mantenga en lo más alto de la clasificación tras las dos primeras jornadas.
El único tanto del partido lo logró Adriano Correia poco antes de lesionarse. Fue en el minuto 44 gracias a un espectacular zurdazo que Willy Caballero se comió con patatas. Así se llegó al descanso y tras la reanudación no hubo novedades en el marcador.
El Barça dominó el juego a placer y el Málaga tardó mucho en arriesgar para buscar el empate. Tuvo alguna que otra ocasión clara, pero los de Bernd Schuster no tuvieron el día y volvieron a perder por la mínima como lo hicieron la semana pasada en Mestalla.
